El pasado miércoles 21 de mayo, la comunidad de Sinergia Empresarial vivió una sesión particularmente reveladora. Bajo el título “El empresario que no se detiene… hasta que su cuerpo lo obliga”, el reconocido médico traumatólogo Dr. José Luis Hernández Reynoso ofreció una ponencia directa, conmovedora y necesaria, que invitó a reflexionar sobre un tema muchas veces postergado: la salud física y mental del empresario.
En un entorno donde los logros, el crecimiento y la productividad suelen ocupar el centro del discurso, la charla del Dr. Hernández Reynoso fue un llamado a mirar lo que muchos líderes prefieren ignorar: los límites del cuerpo humano. Con testimonios reales de pacientes, muchos de ellos empresarios exitosos, el especialista evidenció cómo el desgaste físico y emocional puede acumularse silenciosamente hasta convertirse en una crisis inevitable.
El encuentro comenzó con el tradicional espacio de bienvenida y conexión entre los asistentes, quienes rápidamente generaron un ambiente de cercanía y confianza, propicio para una conversación honesta y profunda.
Durante su exposición, el Dr. Hernández Reynoso no solo compartió casos clínicos de alto impacto, sino que también identificó síntomas comunes que suelen minimizarse: fatiga persistente, insomnio, alteraciones digestivas, taquicardias, episodios de ansiedad, entre otros. “No es normal vivir en estrés crónico ni pensar que descansar es un lujo”, mencionó, provocando en los presentes una visible reflexión.
El espacio de diálogo posterior fue intenso. Muchos de los empresarios asistentes compartieron sus propias experiencias de agotamiento y recuperación, abriendo una conversación franca que rara vez tiene lugar en foros empresariales tradicionales. La vulnerabilidad se convirtió en un puente de conexión más profundo, que fortaleció los lazos entre los miembros del grupo.
La sesión concluyó con la acostumbrada foto oficial y un momento final de networking estratégico, en el que el tema de la noche siguió resonando entre los participantes. Esta vez, las conversaciones no giraron únicamente en torno a negocios, sino también a rutinas de vida, hábitos de descanso y decisiones personales que impactan la salud y el desempeño empresarial.
El evento del 21 de mayo dejó una enseñanza clara: el verdadero liderazgo también implica sabiduría para escuchar al cuerpo, reconocer señales y priorizar el bienestar sin culpa. Porque el éxito, sin salud, termina por perder sentido.
Sinergia Empresarial se consolida así como un espacio que no solo impulsa conexiones de negocio, sino también conversaciones humanas de alto valor. Un espacio donde los líderes no solo comparten estrategias, sino también aprendizajes de vida.
